GABRIEL ESCOBAR MAYA – FUEL MS
El gobierno de México, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, ha actualizado los montos del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), tanto en sus componentes federales como estatales, así como otros gravámenes. Esta medida impactará directamente los precios de una amplia gama de productos y servicios, incluyendo combustibles, cigarros, refrescos, bebidas alcohólicas y otros alimentos procesados. Los ajustes, programados para entrar en vigor el 1 de enero de 2025, anticipan un inicio de año complejo para los consumidores, quienes podrán enfrentar una cuesta de enero más pronunciada.
El Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) es un gravamen indirecto que se aplica a la venta e importación de ciertos bienes y servicios. Desde su implementación en 1980, el objetivo principal de este impuesto ha sido doble: generar ingresos fiscales y regular sectores que producen bienes considerados perjudiciales para la salud.
De acuerdo con el Servicio de Administración Tributaria (SAT), el IEPS se ajusta anualmente con base en la inflación. Para 2025, se prevé un incremento del 4.54%, conforme a lo publicado recientemente en el Diario Oficial de la Federación.
A partir del próximo año, el valor del IEPS federal aplicable a los tres combustibles líquidos de mayor consumo en el país quedará de la siguiente manera [1]:
En cuanto al IEPS de competencia estatal, los montos serán los siguientes:
Por otro lado, el Impuesto al CO2, que también se aplica a los combustibles fósiles, tendrá los siguientes valores:
Aunque el incremento en el costo de combustibles no se paga directamente por los consumidores, el efecto de la actualizacion de los IEPS se traduce en precios finales más elevados. Los importadores y productores de combustibles suelen trasladar estos incrementos a distribuidores, comercializadores mayoristas y operadores de estaciones de servicio, quienes a su vez los reflejan en los precios de venta al consumidor final.
Basándonos en tendencias previas, se espera que el impacto completo de este aumento se refleje en el mercado retail mexicano a partir de febrero de 2025. Nuestras proyecciones indican que el precio promedio mensual de la gasolina regular podría aumentar aproximadamente 70 centavos/lt entre diciembre de 2024 y febrero de 2025*.
Sin duda, un gran reto para la economía mexicana será mitigar los efectos de estos incrementos, especialmente en un contexto donde el poder adquisitivo de los consumidores ya enfrenta presiones significativas, especialmente durante el més de enero de 2025. El ajuste de precios en combustibles también podría tener un efecto cascada sobre otros sectores, generando incrementos adicionales en el transporte y la distribución de bienes y servicios.
*No incluye estaciones de municipios frontera.